anterior

índice

siguiente

el juez de la tierra

Salmo 098

Elevad al cielo un canto nuevo, porque el Padre ha hecho maravillas con todos nosotros. No hemos juzgado, sino que le hemos dejado a Él todo juicio, y Él ha recompensado a la víctima y ha rectificado los pasos del violento. La Justicia del Padre a todos beneficia, es fructífera para todos por igual, para los justos y para los injustos.
Que todos miren con alegría y con respeto a Aquél que hace subir a un tiempo los dos platos de la balanza: El Amor, el único Dios verdadero.
Elevad al cielo un canto nuevo, para que la novedad que cantamos sea también realidad novedosa en nosotros mismos. Que nadie diga: “Conozco a Dios”, porque el verdadero Dios hoy ya muestra otra sonrisa, ¡vayamos a conocerle otra vez!
Que nadie guarde comida del día anterior, que nadie lleve ropa de resguardo, que nadie se crea sabio porque un día supo: Todo ha cambiado, ¡pongámonos en camino y corramos a conocer una vez más a nuestro Padre misericordioso!

anterior

índice

siguiente