KYRIE ELEISON

     

eucaristía

   

 

      E

capítulo 03

SOBRE LA COMUNIÓN CON DIOS


anterior - índice - siguiente

             
  La adoración a Dios como algo externo a nosotros mismos impide la realización del mensaje cristiano en sus últimas consecuencias.

Cristo está en mí y yo en Él: yo mismo soy Cristo.
No se trata de pedirle que me haga igual a Él, que me ayude a ser como Él fue: Se trata de hacerme Uno en Él, de ser yo mismo una encarnación de Cristo.

En tanto que soy Cristo, mi oración siempre va dirigida al Padre, y en ese caminar hacia el Padre, Cristo se hace persona en mí con más y más plenitud.

El Cielo y la tierra se han unido en un punto: Jesucristo.
Él está ontológicamente identificado con el Padre y nos invita a nosotros a identificarnos ontológicamente con Él.

¿Cómo dos cosas se identifican hasta lograr la unidad plena? En el Amor, sólo en el Amor.
Yo podría parecerme a Cristo en todo, hasta en lo más insignificante, pero si yo no estoy identificado con Él por medio del Amor, estoy perdiendo el tiempo.