Eucaristía

Aprendamos de los niños. ¿A qué niño le interesa la infalibilidad del papa o el misterio de la inmaculada concepción?
Hay muchas cosas por las que deberíamos perder el interés si queremos entrar en el Reino. Cosas que obstaculizan el entendimiento entre los hombres, "verdades" estáticas, frias, muertas. Además de impositivas.
No se trata de negarlas ni darlas por falsas, se trata de no apoyarse en ellas, porque son del todo inútiles: no conducen a nada.

Creedme: en la ignorancia está la Verdad. No existe absolutamente ningún conocimiento que sea signo de unión con Dios. Todo conocimiento humano es signo de distancia: Porque estamos lejos de Dios, por eso necesitamos saber, para unirnos a Él.
Por eso, el que realmente haya logrado la unión, que se apresure en diluir ese conocimiento porque, en tanto que lo mantenga, mantendrá también la distancia con el Padre.
¿Es que acaso las escrituras no hablan con claridad? Y yo doy testimonio de que lo que en ellas se dice es Verdad.

Los hombres de Dios, en nuestro empeño de atraer a los demás hacia el Reino, debemos hablar, perder nosotros mismos nuestra unión con Dios para recuperarla en compañía de nuestros hermanos. Y hablamos para que nuestras palabras mueran, pues eso será signo de que han dado fruto.